La mala suerte ha querido que Henry Surtees, piloto de FIA Formula 2 e hijo del Campeón del Mundo de Fórmula 1 de 1964 y múltiple campeón en el mundial de motociclismo, sea el fatídico protagonista de los titulares en el mundo del motor. El jóven piloto de 18 años falleció como consecuencia del terrible impacto con un neumático desprendido del monoplaza de Jack Clark, que había sufrido una salida de pista instantes antes. Por desgracia no es la primera vez que una rueda sin control sesga una vida en el automovilismo.
Descanse en paz.
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